En nuestra sección de entrevistas traemos hoy a Juanjo Morales, un renacentista multidisciplinar en constante y permanente aprendizaje. O algo así.
-
¿Quién es Juanjo Morales? Háblanos un poco de ti
Juanjo Morales es un aprendiz permanente, que sucumbe a la tentación de dejarse llevar por la curiosidad prácticamente a diario. Esto me ha empujado a introducirme en varias disciplinas en muchas de las cuales, afortunadamente, soy autodidacta. Lo digo por la pureza, no por la técnica, claro…. Mis amigos me definen como un hombre del Renacimiento, multidisciplinar, ávido de conocimiento. No me queda otra que reconocer que llevan razón, pero me da un poco de vértigo que me definan así. Tampoco es para tanto….
Creo que nací en clave de sol. Suelo decir que me siento músico desde hace más años de los que tengo y ésto, lejos de ser una bonita frase, solo expresa lo que realmente pienso. La música me ha acompañado desde que con seis años empecé a “tocar la guitarra” y sigo cantando y tocando varios instrumentos, por suerte, hasta hoy. Hace más de 30 años que llevo subiéndome a los escenarios en los que quiero poner los pies, sin ninguna aspiración más allá de pasar un buen rato disfrutando con lo que hago y de trasmitir algo a los que se deciden a venir a compartirlo conmigo.
-
Un hombre polifacético. Músico, cantante, escritor…. ¿Algo más que se nos escapa?
Lo de escritor nace de la necesidad de tener un coqueteo con la literatura. Después de escribir algunos cuentos infantiles, pensé que era hora de hacer algo más extenso y me planteé el reto de hacer una novela: La Lágrima del Ave Fénix, con casi 500 páginas y ambientada en Málaga. Las críticas afortunadamente, han sido excelentes. Luego, por esos giros que da el destino, he hecho dos tratados sobre los encendedores Zippo, a los que he denominado “Enzippopedia” volumen 1 y 2 en versiones española e inglesa. Sorprendentemente para mí, se han vendido en casi 50 países, que yo sepa….
Soy coleccionista Zippo y Presidente de Zippo Club Spain, que fomenta el coleccionismo de estos encendedores y sobre todo lleva a cabo una labor social, para mí, muy importante: La Campaña ‘Zippos X Juguetes’ en la que recaudamos fondos para comprar juguetes que “nuestros Reyes Magos” entregan a los niños de familias más desfavorecidas económicamente de Málaga, cada 6 de enero desde hace seis años. Nada es comparable a la sonrisa de un niño gratamente sorprendido y si lo pienso desde un punto de vista con un toque egoísta, me hace sentirme mejor persona.
-
Tu exquisita manera de cantar demuestra que no hay que hacer estridencias para gustar. ¿Cuáles son tus influencias musicales?
Gracias por esa generosa manera de definir mi interpretación. Nunca me habían calificado así. Yo sólo intento interpretar el sentimiento que la propia canción me genera. Subir octava y media rozando el límite sin capacidad para modular y además intentar adornar con trémolos donde no corresponde, me parece una aberración. Cada cual tiene su tesitura y debería ajustarse a ella. Luego vienen los directos y la mitad de las veces…. simplemente, te cuesta llegar con soltura. La naturalidad y el sentimiento son recomendables siempre. Es mi manera de ver las cosas, por eso procuro vivir lo que canto, sin ninguna pretensión de tener la mejor voz, que hoy en día se traduce en dar la nota más alta, sea como sea.
Tengo múltiples influencias porque me gusta toda la música. Oigo jazz, soul, blues, pop, rock, rock sinfónico, flamenco… todo lo que tenga calidad. Nunca compraré un disco de “regetón” o cualquier estilo donde se use un patrón rítmico y una base armónica para colocarle una letra absurda. De esto, conozco bastantes ejemplos que curiosamente han sido grandes éxitos efímeros. Prefiero no citar intérpretes porque seguro que me olvidaría de alguno.
-
“Anda” e “Italianissimo” son tus dos últimos trabajos, donde podemos encontrar versiones de estilos muy distintos. ¿Eres más de intérpretes o de canciones?
La magia se produce cuando se combinan los dos elementos: canción e intérprete. Creo que todos hemos tenido la sensación de oir “canciones de relleno” en los trabajos discográficos de nuestros intérpretes favoritos. Una mala canción en manos de un excelente intérprete, salvo excepciones que no conozco, no llegará a buen puerto, y al contrario…es un destrozo. Es romper una buena canción por no imprimirle el sentimiento que necesita.
-
¿En qué proyectos trabajas actualmente?
Ahora estoy escribiendo la segunda parte de La Lágrima del Ave Fénix. Voy con retraso para los lectores que me la han venido pidiendo, pero intercalé las Enzippopedias y eso ha dilatado en el tiempo su publicación. También estoy documentándome para el tercer volumen de éstas y ya he iniciado su redacción. En cuanto a la música, espero empezar a grabar pronto el ‘Italianissimo 2’ o como termine llamándose el trabajo. En Italia, gustó mucho el primero, seguramente porque son canciones italianas, cantadas en italiano, que no es lo habitual. A lo que estamos acostumbrados es a versionarlas en español.
Alguna cosa más lleva adelante esta alma inquieta, aunque aún no es momento de adelantar acontecimientos… vamos a dejar que se vayan concretando.